Alguien vendrá que bueno te hará


En este caluroso mes de verano una noticia ha provocado, en un importante número de trabajadores de nuestra empresa, una cierta sensación de tristeza. La causa de tal emoción es que un compañero, muy apreciado por gran parte de nosotros, ha decidido abandonarnos.
Era, y hablo en pasado porque ya no pertenece a nuestra compañía, un hombre muy entrañable, siempre cordial y afectuoso con todos, destacaba por sus formas, jamás una palabra más alta que otra, nunca una frase ofensiva, exquisito con sus subordinados, sobrado de carisma y recursos para saber convencer, jamás necesitaba imponer la fuerza.
Muchos de nosotros recordamos con que elegancia enviaba a los trabajadores a Sevilla, con que clase comunicaba que estaban despedidos, con qué sentido del humor les presionaba. Todos salían encantados al término de las reuniones con él, hemos llegado a ver trabajadores con lágrimas en los ojos, pero, por supuesto, de alegría.
Sabemos que muchos de vosotros pensareis que es una pérdida irreparable, pero desde UGT queremos enviaros un mensaje de optimismo, sabemos que nuestra empresa cuenta con numerosos profesionales de estas características, gente muy similar, que conseguirán que no se note su ausencia, que incluso pueden superar el listón por él establecido, y como dice el refrán “ALGUIEN VENDRÁ QUE BUENO TE HARÁ”.